lunes, 3 de agosto de 2009

Notorious

Esta semana he visto mi primera película en 3d. Fue UP, una gran película que otros blogs y críticos analizan mejor de lo que yo pueda hacer. No obstante, me gustaría reseñar que esta nueva tecnología de proyección puede suponer un salto cualitativo que ayude a mantener la industria audiovisual tal y como está, para alivio de los productores que no son ni demasiado transgresores ni demasiado conservadores. Es todo un acierto emplear esta tecnología en producciones destinadas al público infantil, ya que cuando ellos sean los que se paguen la entrada, la tecnología estará totalmente implantada y percibirán la siguiente diferencia: una película se ve en el cine en 3d y una serie de tv se ve en casa. No digo que esta tecnología provoque que se descarguen menos películas, sino que se irá más al cine. En esta era en la que se criminaliza la piratería (el mismo nombre ya compara a quién se descarga una película sin pagar con un alguien que roba, tortura, asesina, viola, extorsiona, etc.), caemos en un error si pensamos que el número de películas descargadas es inversamente proporcional al número de espectadores en una sala de cine. Ir al cine es una actividad social, y en la mayoría de los casos, lo que provoca una descarga es que una película que jamás hubieras pagado por ver, la veas. Muy pocas veces se deja de ir al cine a ver una película que de verdad te interesa porque te la hayas descargado. Volviendo a Up, es cierto que tiene un gran guión y que es una obra maestra, pero por favor, no cometan el error de descargársela y visionarla en un monitor de ordenador. Vale la pena acercarse hasta la sala 3d más cercana y disfrutar. Vamos con la crítica de la semana:

Notorious

Este es un biopic sobre el rapero Notorious BIG. Antes de entrar en detalle a hablar sobre la película, me parece interesante destacar la cantidad de biopics que se hacen sobre personajes afroamericanos, que es considerablemente mayor a la que se hace de personajes blancos. ¿Responde este hecho a una necesidad de reafirmación socio-racial? Como he leído en la crítica de Claudia Puig en el USA Today sobre esta película, “mitifica a alguien que trató a la gente, particularmente a las mujeres, despectivamente, y que en su vida y en su arte hizo de las drogas, la promiscuidad y la violencia algo glamouroso.” Esta claro que esta no es la mejor vía para reivindicar la igualdad racial, ya que el amigo Biggie Smalls no era un ejemplo a seguir, por mucho que el realizador de la cinta, George Tillman, Jr. se empeñe en ello.

Esta película es un ejercicio de técnica efectivo, sin errores y con una planificación y un montaje ágil que provoca que el producto final sea muy entretenido a lo largo de las más de dos horas de metraje. Si además te gustaba la música de Notorious BIG o simplemente alguna canción suya forma parte de la banda sonora de algún recuerdo, como en el caso del que escribe, la película gana enteros. El filme tiene en su haber las interpretaciones de todo su elenco, que están muy trabajadas. Destacaría, a parte de la de Jamal Woolard (Notorious BIG), la de Antonique Smith (Faith Evans) y la de Naturi Naughton (Lil Kim).

La película tiene un problema fundamental: la distribución de información. Hasta los que no son expertos en la vida del controvertido rapero pero la conocen bastante tienen problemas siguiendo los acontecimientos. El personaje de Voletta Wallace desaparece prácticamente durante todo el segundo acto de la película, así como la primera novia de Notorious, que no reaparece hasta el final. Por otra parte, hubiera sido conveniente haber profundizado más en el paso de la amistad a la enemistad entre Notorious BIG y Tupac. La película, más que arrojar luz sobre la controvertida guerra del rap entre la costa este y la costa oeste de finales de los noventa, parece que lanza más dudas. Es una película que para el que no es fan de Tupac, de Notorious o del rap en general, será muy difícil de ver. Pero si te encuentras en este grupo, seguramente no llegarás a comenzar su visionado nunca y por esta razón me extraña mucho que está película haya logrado una distribución comercial en un país que ignora tanto el rap como España.

1 comentario:

Sergi T. dijo...

Por el título pensaba que ibas a hablar de la obra maestra de Hitchcock pero me encuentro con un MR cualquiera...

Respecto a los formatos de exhibición, sí, estoy de acuerdo, pero sólo a medias. Está claro que el estúpido espectador medio irá más al cine porque 'el 3D chana' pero espero que entendamos el formato como una posibilidad más de enriquecimiento de la película y no una mera forma de exhibición de efectos digitales en forma de traca final de fiestas que para eso ya tenemos los castillos de fuegos artificiales.